Conócenos
Descubrí el yoga en la adolescencia interesada por la filosofía oriental, pero no empecé a practicar hasta los 24 años. La necesidad de conectar con mi cuerpo y sentirme mejor fue lo que me impulsó a asistir a una clase de yoga. La práctica de yoga me ayudó a reconciliarme con mi cuerpo, a despertar mis sentidos y poco a poco a sentirme mejor conmigo misma.
Mis primeras clases me marcaron en positivo, y aunque no siempre era agradable el proceso de explorar mi cuerpo y sentirme, el resultado merecía siempre la pena. Con el tiempo decidí que quería seguir profundizando y en 2010 comencé mi primera formación de Yoga Integral. Fue una formación continua durante tres años, lo que me permitió integrar el Yoga como estilo de vida. Modifiqué hábitos y la relación conmigo misma y con mi vida se fue transformando.
Desde entonces he seguido formándome en diferentes estilos de yoga como Ashtanga, Nidra, Terapéutico y he realizado especializaciones de Yoga Adaptado, Prenatal, Infantil y Familiar. He participado en varios retiros de Meditación Vipassana, me he formado en Meditaciones Activas y he tenido experiencias varias en retiros y cursos afines de crecimiento personal. Estudio Vedanta de forma regular desde 2016 y me tiene apasionada. Actualmente estoy inmersa en el estudio de textos clásicos como Yoga Sutras y Bagavad Gita.
En 2012 me establecí con mi familia en Albacete y desde entonces he ofrecido clases de yoga en diferentes espacios y para todas las edades, desde yoga con bebés, prenatal, en familia, infantil y juvenil, hasta adultos y mayores.
Entiendo el yoga como un camino de autoconocimiento y aunque la mayoría de las veces llegamos a el por necesidad, con problemas físicos y/o emocionales, con la vida y el ánimo revueltos, si mantenemos el compromiso con nosotros mismos, las herramientas que el yoga nos ofrece nos ayudan a rehacernos, ordenar nuestros hábitos, serenar la mente y calmar las emociones para poder vernos de forma más clara y honesta.
Mi intención es que cualquier persona que así lo sienta pueda encontrar en el camino del yoga un espacio donde dedicarse tiempo y cuidarse, no sólo a nivel físico, sino también mental y emocional.
Considero que el yoga nos ayuda a aceptar nuestra vida y a nosotros mismos, nos aporta claridad y nos invita a cuidarnos para poder afrontar con la mejor actitud, aquello que la vida nos ofrece. Me considero una persona sencilla a la que le gusta caminar en la naturaleza, hacer deporte y pasar tiempo con mi familia. Disfruto mucho bailando y me sorprendo cantando mientras realizo tareas cotidianas. Me gusta cocinar y comer. Disfruto leyendo y me encanta ver películas en familia. El yoga me ha ayudado a madurar y a encarar la vida con responsabilidad, alegría y apertura, pues no siempre el camino es fácil pero en nuestra mano está hacerlo sencillo.